MAX BRAUN. EL INICIO.

En 1921, el ingeniero Max Braun estableció su empresa en Frankfurt am Main, en un principio fabricando componentes para radios y, a partir de 1929, amplificadores y receptores de radio.

El primer producto integral fabricado por Braun fue un amplificador de potencia.

Max Braun fue uno de los primeros fabricantes europeos que combinó radio y tocadiscos en un mismo aparato. En 1934 nació el logotipo de Braun, con su característica «A» alargada y redondeada en el centro.

Max Braun

Durante la 2ª Guerra Mundial, Braun se vio obligada a abandonar prácticamente la producción para el sector civil. En 1944 sus fábricas de Frankfurt quedaron destruidas casi por completo. En 1945, Max Braun comenzó a reconstruir su empresa con 150 empleados.

Después de la guerra Braun siguió produciendo radios y se convirtió en una referencia en el mercado por su sonido de “alta fidelidad” y los tocadiscos, que incluían la famosa línea SK.

1950 presenció el lanzamiento de la primera afeitadora eléctrica, la «S 50», que combinaba un elemento de corte oscilante con una lámina de acero ultrafina, y sin embargo estable, por encima. Este principio ha seguido empleándose, en una forma más refinada y perfeccionada, en las afeitadoras Braun hasta el día de hoy. La afeitadora fue diseñada en 1938 pero su fabricación tuvo que retrasarse por culpa de la guerra.

Braun S 50

Max Braun falleció repentinamente en noviembre de 1951. Sus hijos, Artur (26) y Erwin (30), tuvieron que asumir la dirección de la empresa de la noche a la mañana.

LOS HERMANOS BRAUN: VISIÓN Y EMPRESA

Los hijos del fundador no estaban del todo faltos de preparación. Erwin tenía un título de empresariales y Artur era un ingeniero con experiencia. Por otra parte, los hermanos se habían visto profundamente afectados por las negativas experiencias durante la dictadura Nazi y la guerra. Su sueño para un futuro mejor se apoyaba en el respeto a las personas: empleados y clientes.

Para hacer realidad esta visión, desarrollaron un concepto de empresa integral. Ya en 1951, los hermanos Braun introdujeron una revista para los empleados, rápidamente seguida por el revolucionario Centro de Salud Braun y una moderna cafetería donde se ofrecían comidas nutritivas de gran calidad, tradiciones que han continuado hasta hoy en día.

Para el segmento de radios y tocadiscos, que había empezado a estancarse, Erwin Braun sólo veía potencial de mercado si la empresa era capaz de reinventarse con éxito. Los productos tradicionales (pulidas cajas de madera noble, profusamente decoradas, con los altavoces ocultos tras doradas rejillas) ya no estaban en línea con los gustos de la época. Su objetivo era encontrar a alguien que pudiese ayudarles a desarrollar y hacer realidad los nuevos conceptos de diseño y las nuevas corrientes estéticas.

El Dr. Fritz Eichler, historiador del arte, diseñador de interiores, director de cine y compañero de armas de Erwin Braun, fue su primer aliado. Inicialmente asignado a la producción de nuevos cortos publicitarios, pronto asumió un papel en la dirección y, desde 1956 obtuvo el cargo oficial de Director de Diseño, desempeñando un rol fundamental en la creación de una nueva imagen.

Rediseño del Logo Braun realizado por Otl Aicher en los años 50

EL NUEVO CONCEPTO DE DISEÑO Y EL COMIENZO DE LA ERA DE DIETER RAMS

El punto inicial del nuevo concepto de diseño era una valoración positiva de los potenciales clientes: inteligentes y abiertos a nuevas ideas, personas que apreciasen productos discretos que les permitieran amplia libertad para el desarrollo personal.

Tras asistir a una histórica conferencia sobre diseño industrial y responsabilidad empresarial pronunciada por Wilhelm Wagenfeld (integrante del movimeinto BAUHAUS), Erwin Braun se sintió tan profundamente confirmado en sus convicciones que de inmediato encargó a Wagenfeld un nuevo proyecto de diseño. En búsqueda de nuevos diseñadores, a finales de 1954, Braun inició contactos con la joven academia de diseño de Ulm, denominas HfG, «Hochschule für Gestaltung», que se había constituido para continuar el trabajo del movimiento Bauhaus, desmantelado por los nazis en 1933. Dos profesores de la HfG, Hans Gugelot y Otl Aicher, crearon un equipo que dejaría huella en la historia del diseño y en Braun.

En tan sólo ocho meses, lograron renovar por completo la imagen de toda la línea de productos Braun, desde radios portátiles a equipos de música. El primer gran lanzamiento tuvo lugar en la Feria de Electrónica de Dusseldorf en 1955. El stand creado por Otl Aicher transmitía, incluso desde la distancia, que en él se ofrecía algo fundamentalmente novedoso y diferente al resto de expositores.

La contratación, también en 1955, de Dieter Rams, que por entonces contaba 23 años de edad, tendría implicaciones de largo alcance. Rams comenzó trabajando como diseñador de interiores, para rápidamente, convertirse en el núcleo del departamento de Diseño de Braun que, bajo la dirección de Fritz Eichler había empezado a funcionar, con colaboraciones externas, en 1956.

Poco a poco el nuevo estilo de diseño de Braun se extendió no sólo a toda la gama de productos, sino también a los materiales de comunicación, desde el papel de oficina hasta la publicidad. Esto proporcionó a Braun una imagen corporativa mucho tiempo antes de que se acuñase el término.

En cuanto a la fabricación de productos, en 1954 se desarrolló y comercializó el primer proyector fotográfico, uno de los pilares de negocio que se prolongó durante los siguientes cuarenta años. En 1956 pasó a comercializar el primer proyector de diapositivas fotográficas totalmente automático, el PA1. La innovación de Braun en este campo fue introducir una bandeja lineal (o recta) en lugar de uno en forma de carrusel, lo que le permitió que el proyector fuese pequeño y compacto.

En 1962, pasó a llamarse Braun AG y comenzó a cotizar en bolsa. Durante la década de los 60  Braun creó la radio de bolsillo T3 diseñado por Rams. En esta época mejoraron los proyectores de diapositivas con una óptica de alta calidad y un diseño totalmente metálico, funcional y elegante por lo que competían en el mercado mundial con Kodak y Leitz. En 1967, Gillette Group adquirió una participación mayoritaria de la compañía.

EVOLUCIÓN A TRAVÉS DE LAS DÉCADAS

El nuevo concepto de diseño llevado a la práctica por Dieter Rams y el equipo de diseño de Braun pronto adquirió fama; ya a finales de los años 50, algunos productos de Braun fueron incorporados a prestigiosas colecciones permanentes como la del MoMA (Museum of Modern Art) de Nueva York.

Durante este período, se mantuvo la tradicionalmente fuerte presencia de Braun en el segmento de radios, tocadiscos y combinaciones de ambos -radios y tocadiscos- de Alta Fidelidad. Sin embargo, desde los años 60, las afeitadoras eléctricas de Braun, encabezadas por la afamada Sixtant, pasaron a convertirse en un segmento de negocio fundamental, como lo harían los productos para el hogar, procesadores de alimentos y batidoras de vaso que se lanzaron, ya con el nuevo diseño, a finales de los años 50 y llegaron a los mercados internacionales en la década siguiente.

En los años 70 y 80 nuevos segmentos de productos cobraron importancia y plantearon exigentes demandas al equipo de diseño de Braun. En los años 70 se desarrollaron los secadores de pelo y a finales de esa misma década los rizadores y moldeadores para el estilismo del cabello. Estos productos para el cuidado personal exigían un diseño centrado en la ergonomía y la facilidad de uso. Los relojes de mesa y pulsera y las calculadoras fueron importantes sobre todo en los años 80, y con ellos se sentaron nuevos estándares para la claridad y reducción del diseño, combinado con tecnologías innovadoras.

Durante los años 80 Braun dio por terminada su presencia en el sector de la Alta Fidelidad con una exclusiva «Edición Limitada», para centrarse en el mucho más rentable sector de los pequeños electrodomésticos, y en especial en los productos para el cuidado personal y el hogar.

Las afeitadoras pasaron a ser, y todavía lo son, el principal segmento de negocio de Braun, introduciendo innovaciones en su diseño, como la combinación de dos materiales para lograr suaves rugosidades sobre una superficie dura que proporcionaban un mejor agarre.

En los años 90 emergieron dos importantes segmentos de negocio: el cuidado dental eléctrico y la depilación femenina. La exclusiva asociación de Braun y Oral-B dio lugar a la creación de los cepillos dentales eléctricos diseñados por el equipo de Braun, una asociación que se mantiene con éxito hoy en día en el seno de P&G. Braun también adquirió las depiladoras Silk-épil, expandiendo la marca hasta convertirla en uno de los principales nombres en el segmento de belleza femenina.

RUMBO ACTUAL DE LA EMPRESA

A mediados de la década de 1990, Braun tenía una posición de liderazgo entre los fabricantes de electrodomésticos del mundo, pero las preocupaciones sobre la rentabilidad comenzaron a emerger. Muchos de los competidores de Braun imitaban sus diseños, pero los producían a un menor coste porque los fabricaban en países de mano de obra barata.

Gillette fue adquirida por Procter & Gamble («P&G») en 2005, por lo que Braun también pasó a ser propiedad de esta multinacional. A principios de 2008, P&G dejo de comercializar los productos Braun en América del Norte, excepto las máquinas de afeitar y cepillos de dientes eléctricos. En Europa, sin embargo, Braun siguió vendiendo todas sus categorías básicas hasta el año 2012, cuando la marca Delonghi adquirió la propiedad sobre la fabricación de algunos de los prodcutos relacionados con el hogar (cafeteras, exprimidores, plancjas y otros).

En la actualidad, Braun se centra en cuatro segmentos fundamentales: afeitado masculino con las afeitadoras eléctricas Braun Series, depilación femenina con las depiladoras Silk-épil, cuidado del cabello con la gama Satin Hair, y cocina y hogar con las batidoras Minipimer y las planchas TextStyle.

Lo que permanece inmutable en el tiempo es la visión de los hermanos Braun, que se traduce en unos valores esenciales: crear productos basados en el respeto a las personas, empleados y clientes, y usar el diseño como medio esencial para lograrlo.